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«Los procuradores somos los ojos y las manos de los letrados en los juzgados, impulsamos las gestiones y las estrategias jurídicas»

Belén Núñez, directora del área de procuradores de Atlante.

Recientemente, Atlante ha nombrado como nueva directora del área de procuradores a Belén Núñez, que desarrollará la gestión de todas las carteras y demandas de los clientes del sector, así como el seguimiento de los KPI –indicadores clave de rendimiento– y los SLA –acuerdos del nivel de servicio-. De esta noticia se han hecho eco diversos medios, entre ellos Confilegal, que realizó una entrevista a Belén Núñez sobre su nuevo puesto.

Belén Núñez destacó la necesidad de modernización de los procuradores para «adquirir más protagonismo en los pleitos como colaboradores en las ejecuciones». Tras esto, señaló que la relación entre los procuradores y los medios digitales disponibles es una de sinergia, y no de rivalidad ya que, como dijo, «la tecnología no compite con la procura, sino que el legaltech presta su servicio gracias a la información proporcionada por los procuradores, que toman el pulso diario de la situación de gestión procesal en España»

«A su vez, esta tecnología hace que seamos capaces de generar informes y estudios sobre asuntos como lo sería, por ejemplo, el impacto de la huelga de letrados de la Administración de Justicia», indicó Núñez. «Los profesionales tienen que evolucionar y adaptarse, pero no significa que no sean necesarios, sino que se ligan a la tecnología».

La amplia experiencia de Belén, que abarca entidades financieras y bancarias, una red de procuradores y un «servicer», le ha dado la oportunidad de «ver todas las perspectivas del mundo de la recuperación», que ahora se ve transformado por el legaltech.

«El cliente necesita seguridad y cero incidencias en la gestión, certeza y rigor en los procedimientos, control, agilidad y proactividad (…) requieren calidad en la información, que esta esté depurada y actualizada, especialmente si llevan carteras con muchos clientes, y un buen sistema de reporting«

Belén Núñez, directora del área de procuradores de Atlante.

La procuraduría es un área más, en la que «el legaltech ofrece un servicio integral de letrados y procuradores que demanda el cliente», añadió, poniendo en relieve la potencia de los medios tecnológicos de Atlante. «Somos pioneros introduciendo tecnología en los procedimientos, como con la gestión de notificaciones; siempre contamos con la revisión de los gestores procesales, pero se ha triplicado su calidad de gestión»

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El pasado día 16 de marzo, Atlante, en colaboración con LA LEY, celebró la webinar: la nueva forma de ejercer la abogacía gracias a la tecnología, donde se permitió conocer el impacto que las nuevas tecnologías como ChatGPT e inteligencia artificial están teniendo y van a tener sobre las nuevas formas de ejercer la abogacía, la formación de los profesionales y el desarrollo de nuevos modelos de negocio en el sector.

«Legaltech son ese conjunto de herramientas que sirven para mejorar la eficiencia o la calidad del servicio jurídico o, en el caso, de su aplicación al ámbito de la Justicia, de hacerla más accesible.»

Patricia Manca, Socia Líder de New Law, PwC Tax and Legal.

Que la tecnología iba a transformar la forma de prestar servicios jurídicos era algo sabido, pero que esa transformación se iba a acelerar en la forma en que está haciendo en los últimos tiempos, y previsiblemente lo va a seguir haciendo en los que vienen, no parecía tan claro.

La llegada y la difusión masiva de una sola tecnología, como ChatGPT, ha conmocionado profundamente al sector legal y no cesa de plantear, casi día a día, nuevos interrogantes y perspectivas sobre las posibilidades que ofrece. Y que, sin duda, no van a cesar de aumentar en los próximos meses.

En cuanto a la forma en que estas herramientas están transformando la forma de prestar servicios jurídicos profesionales, Patricia Manca recordó que este cambio ha sido paulatino pero incesante a lo largo de los últimos años. En su opinión, el reflejo más relevante de este cambio es el surgimiento de nuevos modelos de negocio, a partir de la automatización de procesos internos y la explotación de los datos disponibles por las firmas y con los que anteriormente no era posible trabajar.

Esta posibilidad de trabajar con los datos facilita la toma de decisiones para el negocio y, en sí mismo, implica la transformación de la profesión y el surgimiento de nuevas áreas de especialización.

En este sentido, Elen Irazabal señaló que los perfiles híbridos o técnico-jurídicos son ya una necesidad que se está acelerando progresivamente, a causa de la cada vez mayor llegada al sector de la IA. Y ello pese a que, en su opinión, los abogados no están preparados para enfrentarse al desafío de la IA, ni desde el punto de vista regulatorio que, por ejemplo, va a implicar la necesidad de trabajar junto a los técnicos para realizar auditorias de los sistemas, ni en el de su aprovechamiento para la innovación. Algo preocupante teniendo en cuenta, advirtió, que la IA va a incorporarse mucho más fuertemente de lo que ya lo venía haciendo a herramientas de uso cotidiano por los juristas, como el correo electrónico o el entorno Office, de forma que la innovación va a estar marcada por la IA.

Esta tecnología se está utilizando en la automatización de procesos, como el envío de emails o el reporting a cliente, explicó Sonia Benito. Para ello es necesario segmentar los procesos y analizar las necesidades que generan y la tecnología disponible. Pero, como explicó Elen Irazabal, tiene utilidad también en la gestión de asuntos en los que hay “mucho de algo”, como es la gestión de las notificaciones judiciales y en los casos masivos.

Puedes leer el artículo completo escrito por LA LEY a continuación: https://diariolaley.laleynext.es/dll/2023/03/17/la-innovacion-en-el-sector-juridico-va-a-estar-marcada-por-la-inteligencia-artificial

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Elena Trujillo, Abogada de Atlante, realizó una tribuna para Lefebvre, compañía líder en el suministro de información jurídica, acerca de la tecnología en la abogacía.

Lee el artículo completo a continuación:

Que vivimos en una vorágine tecnológica no es ninguna novedad, pero que la tecnología pueda desplazar la función imprescindible de esgrimir argumentos jurídicos que realizan a diario los abogados en los juicios, sí que es un verdadero giro de guion para estos profesionales.

La tecnología se ha adueñado de la cotidianidad, pero aún quedan espacios donde parece que la digitalización se halla ante obstáculos. La Justicia es uno de estos ámbitos donde la digitalización no ha conseguido colarse por todos sus procesos, sin embargo, el tren del legaltech no desiste en su empeño.

A principios de año la firma DoNotPay daba a conocer su robot abogado en EE. UU. Una novedad que revolucionaría el legaltech, pero ¿era el primer robot abogado anunciado?

DoNotPay no es del todo pionero en este anuncio. La firma Baker & Hostetler en Estados Unidos ya contrató la IA conocida como ROSS basado en tecnología IBM que funciona como “asistente” del abogado. Se considera a ROSS como inteligencia cognitiva, capaz de aprender, entender y razonar.

Este robot, una vez se le plantea el caso, analiza toda la normativa aplicable al mismo, la doctrina, jurisprudencia relacionada, procesa toda esa información y da una conclusión al abogado sobre cuál sería la estrategia jurídica a seguir, pero no ofreciendo diferentes opciones (como hace actualmente cualquier buscador en internet), sino que ofrece al abogado la respuesta que considera más conveniente teniendo en cuenta todas las variables que ha procesado. Además, este robot es dinámico, es decir, su uso del machine learning hace que cuantos más casos estudia, más “aprenda” de ellos y más específica dará su respuesta ante los futuros casos planteados.

Este robot es utilizado como “asistente” del letrado, pero, si le proporciona la respuesta, ¿acaso no está desplazando la función del abogado a un simple actor que reproduce los argumentos obtenidos por un software?

Y es justamente esta ambiciosa propuesta la que esgrimía la firma DoNotPay. Esta empresa iba a ser capaz de sustituir a los letrados y el propio demandado o demandante podría acudir al juicio solo con la aplicación y reproducir sus argumentos.

Esta firma ha desarrollado una IA basada en el modelo de procesamiento de lenguaje desarrollado por OpenAI conocido como GPT. Esta IA se basa en el entrenamiento en lenguaje natural en un vasto volumen de textos en distintos idiomas. Una vez esta IA se encuentra alimentada con todos estos textos, es capaz de devolver sus propios contenidos coherentes.

Por tanto, este robot abogado no es más que una iteración de esta IA, preparada para dar consejos y textos legales, estandarizando todos los argumentos y discursos legales que podría ofrecer un abogado ante miles de casuísticas. ¿Se imaginan estandarizar todas las casuísticas de un proceso judicial?

Sin embargo, el éxito que pretendía esta aplicación como potencial abogado no ha llegado a buen puerto por dos motivos principales. El primero, por el rígido proceso judicial. para que esta aplicación pudiera ser usada de forma efectiva en un proceso, debía grabar todo el juicio. En España, la grabación de las vistas orales se hace de forma oficial por el propio juzgado, difícilmente podría encajar el uso de grabaciones de particulares. En todo caso, debería contar con un consentimiento expreso del juez. En el caso de EE. UU., donde esta aplicación iba a probar suerte, la corte Suprema prohíbe expresamente el uso de aparatos electrónicos durante el proceso judicial. Asimismo, esta aplicación podría llegar a tener dos formas de uso y solo una de ellas sería “viable”. Que el demandado/demandante fuese representado por su abogado, pero solo como requisito formal, ya que sería un mero interlocutor entre los resultados que ofreciera el software y el juez, o la segunda opción, la cual excluye la figura del abogado y el mismo demandado/demandante, sería el interlocutor entre el software y el juez. Sin embargo, esta segunda opción queda aún más descartada, ya que la representación judicial tanto en España como en EE. UU. debe ser ejercida por una persona colegiada.

En segundo lugar, la falta de desarrollo. El inicio de esta IA no era esgrimir argumentos jurídicos en el momento de recibir todos los datos de un caso judicial, sino que su función original era que cualquier ciudadano pudiera “contar” al ChatGPT qué le había ocurrido ante una multa de tráfico y esa aplicación devolvía el escrito jurídico para presentar ante el tribunal pertinente. Ciertamente esta funcionalidad de preparar recursos para multas de tráfico sí que se ofrece para poder estandarizarse de una manera mucho más sencilla, sin embargo, ¿estandarizar un divorcio? Efectivamente, no ha habido éxito en este trámite, ya que un testeo externo por una abogada offline indicó que, tras introducir los datos para conseguir una demanda de divorcio, el tiempo aproximado que la aplicación preveía para devolver este escrito era de 8 horas, aunque dos días más tarde aún no disponía del documento.

Ahora bien, a pesar de que DoNotPay no ha conseguido posicionarse como pionera en generar el primer abogado robot que pudiera defender en sala, ¿es posible que una IA almacenase todas las variables de un caso, que entendiera  los argumentos del contrario y los interrogatorios y pudiera relacionar el caso con las nuevas variables que se presentan en el momento del juicio, volver a procesar una vez teniendo estos nuevos argumentos los precedentes judiciales, otros argumentos jurídicos, textos legales, artículos de investigación y normativa aplicable al caso y responder en tiempo real de acuerdo a lo argumentado de contrario? ¿Será posible que la IA pudiera proporcionar argumentos jurídicos coherentes a todas las alegaciones esgrimidas en sala por los participantes y los relacionará con la normativa y jurisprudencia?

Fuera del ámbito judicial, si tenemos en cuenta que la IA fue capaz de diseñar el sistema AlphaGo, que no solo aprendió a jugar al juego de mesa Go, sino que innovó y creó nuevas jugadas que nunca le enseñaron sus creadores de carne y hueso, sino que las aprendió de forma autónoma, dando mejor respuesta que la que daría un humano a través de aprendizaje supervisado, quizá haya que reformular la pregunta y no debemos cuestionarnos si es posible que la IA pudiera ostentar de manera eficaz la representación en un juicio, sino cuándo sucederá.

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Sonia Benito, Managing director en Atlante, ofreció una entrevista en Dirigentes acerca de la digitalización en el sector jurídico.

Puedes leer la entrevista completa a continuación:

¿En qué punto está el sector legal en cuanto a digitalización?

La digitalización en el sector legal español se ha convertido en una necesidad porque nuestro actual sistema lleva años de retraso. En el sector público si bien ya se han dado los primeros pasos gracias a los Fondos Next Generation, aún hay un camino largo por recorrer y alcanzar el objetivo de contar con una justicia eficiente, sostenible e interconectada. Con respecto al sector privado, desde mediados de 2020, en gran parte gracias al auge tecnológico derivado de la crisis del COVI-19,  cada vez son más los operadores jurídicos que nos apalancamos en la tecnología para hacer más eficiente la prestación de los servicios jurídicos.

¿Cómo está transformando el sector legaltech el campo jurídico?

Las legaltech estamos transformando la forma de ejercer la abogacía y de prestar servicios legales. Somos empresas que desarrollan sus servicios de una forma alternativa a los prestadores de servicios jurídicos tradicionales. Fundamentamos nuestra actividad sobre los criterios de eficiencia y eficacia sin olvidar en ningún momento la calidad y especialidad que requiere la profesión jurídica. En Atlante colaboramos en poner nuestra más alta tecnología al servicio de nuestros clientes para dotarlos de eficiencia. Con el fin de gestionar de forma optimizada procedimientos judiciales y convertirnos en un verdadero partner de nuestros clientes, nos apoyamos en nuestro ADN tecnológico basado en IA y Machine Learning, lo cual permite la automatización de procesos y la reducción del error humano.

En España, ¿ha sabido el sector legal sacar partido a la tecnología o aún no está tan implantada como en otras áreas?

El sector legal está visto como uno de los más precarios en tecnología e innovación, por ello uno de los grandes propósitos de este 2023 es terminar con esa leyenda negra por la vía de los hechos. Tenemos siete años para ser un país próspero en este aspecto, necesitamos de una Administración pública de vanguardia capaz de proporcionar servicios de calidad homologables, capaces de intercambiar información y procedimientos con facilidad, tanto internamente como a los países más desarrollados, de modo que los operadores jurídicos privados que hayamos implantado el factor tecnológico podamos actuar con la Administración en todo un abanico de posibilidades que van a cambiar el mundo legal, por su extensión a procedimientos donde hoy aún es impensable una actuación propia del ssiglo XXI.

No obstante, es importante reconocer que se ha dado un primer paso con el desarrollo del proyecto de Ley de Eficiencia Digital del Servicio Público de Justicia, pero que hasta hoy no se ha empezado a ejecutar.

¿De qué forma puede la tecnología conseguir la eficiencia?

La tecnología bien aplicada y con el acompañamiento de conocimiento jurídico correcto, consigue la reducción de tiempo, de recursos y ayuda, a su vez, a prestar un servicio de calidad y confiable.

La tecnología es una aliada que nos puede ayudar en multitud de tareas asociadas a los servicios jurídicos: automatización de tareas administrativas y de poco valor añadido, el análisis de documentos legales y extracción de sus entidades para crear procesos internos de trabajo eficientes, generación de escritos legales de forma automatizada, predicción a través del análisis del dato los comportamientos de los tribunales o, incluso, revisión de hitos y estado de procedimientos.

En Atlante trabajan con machine learning e IA para, entre otros, procesar documentos judiciales o rastrear cuentas de consignaciones bancarias, ¿cómo funciona?

Atlante se ha apoyado en su ADN tecnológico basado en IA y Machine Learning para crear un ecosistema propio, LYRA, el cual gestiona miles de procedimientos judiciales. Este software ha procesado más de 8 millones de documentos legales, que se traducen en datos más automatizados, organizados y homogéneos, claves para lograr una gestión optimizada y la reducción del error humano al mínimo. Nacimos con una vocación tecnológico y nuestro sistema nos permite ir aprendiendo y creciendo sobre la base de nuestra propia gestión.

Desde la puesta en marcha del ecosistema de IA de la compañía, éste acumula más de 340.000 expedientes de gestión, llegando a tramitar 190.000 demandas solo en 2021, registrando un volumen de más de 16.000 notificaciones diarias y 8 millones de documentos.  Asimismo, contamos con una conexión directa y automatizada con Banco Santander, que ha permitido rastrear automáticamente miles de cuentas de consignaciones bancarias en las que nos encontramos personados.

¿Cuáles son las últimas innovaciones que han adoptado?

Atlante ha impulsado hace unos meses dos nuevas líneas de negocio dotadas de tecnología. La primera es Dividae, una plataforma 100% online que ofrece a asesores, gestores y abogados una solución para ayudar a sus clientes a reclamar aquellas facturas no cobradas. Con esta herramienta buscamos que las pymes y autónomos reclamen una deuda sea cual sea su importe a través de tecnología avanzada, eficiente, con seguridad jurídica y transparencia en su proceso.

La segunda es Legal Insights, una plataforma de análisis de datos diseñada para el sector jurídico con la ambición de generar y trabajar con la mayor información del dato para alcanzar los objetivos del área legal. Legal Insights utiliza más de 15 millones de líneas de información provenientes de procedimientos judiciales y analiza todo tipo de procedimientos en cualquier fase y a cualquier nivel, desde el autonómico hasta el de un juzgado concreto. De esta forma, permite realizar valoración de carteras y estrategias legales, optimizar la gestión interna, realizar benchmarking legal, establecer sistemas de alertas a nivel de juzgados o crear documentos informativos que reflejen las tendencias legales en formatos ejecutivos. Una innovación disruptiva que queremos compartir con nuestros partners, instituciones y administración.

El Proyecto de Ley de Eficiencia Digital del Servicio Público de Justicia, ¿cómo va a cambiar el panorama?

La importancia del proyecto de Ley de Eficiencia Digital del Servicio Público de Justicia radica en poder dar salida (con lo que ello supone en término económicos) a los 11.000 millones de euros (más del 1% del PIB) que, según un estudio de SIGMA DOS, se hallan paralizados sin ejecutar en la justicia española, pero también en aprovechar el dato como fuente de información cada vez que realizamos una actuación judicial. Cabe resaltar que, respecto a este último, la homogeneización del dato en el ámbito judicial es uno de los aspectos que más se tienen en cuenta en este proyecto, pues ayudará a analizar las necesidades de las administraciones, la carga de trabajo de los juzgados y establecer dónde se pueden aplicar mayores recursos tanto humanos como tecnológicos. De modo que funcionaríamos de forma efectiva al mismo tiempo que ponemos a la tecnología a nuestra disposición. Sin embargo, es importante tener en cuenta que para una exitosa homologación de los sistemas se necesita de la voluntad del Ministerio de Justicia como de las Comunidades Autónomas para su efectiva implantación. Solo así se trazaría un dato más limpio, del que se pueda obtener estadísticas y metodologías para que la justicia sea mucho más eficiente.

#LYRA #Atlante #Justicia #Digitalización #Legaltech #Dividae

El pasado día 20 de febrero, Expansión se hizo eco de los datos extraídos a través de Legal Insights, la hueva herramienta creada por Atlante en colaboración con Goriz Advisors, acerca de las consecuencias de la huelga de los Letrados de la Administración de Justicia, que ya lleva más de un mes en activo.

Así, según el informe ofrecido por la herramienta, desde el inicio de la huelga hasta el día 17 de febrero, el descenso medio en las notificaciones fue del 49% respecto al mismo período que el año anterior.

Vemos que los procedimientos van a sufrir un atraso aún mayor que el que acusaban, ya que el impulso desde los juzgados ha caído un 40%. Además, hay un impacto económico directo en que han dejado de llegar casi el 60% de los pagos judiciales durante las últimas cuatro semanas.

Sonia Benito, Managing director en Atlante.

Durante la segunda y tercera semana de la huelga, el parón en la actividad de los tribunales fue superior al 50%. Por el momento, las CCAA más afectadas son La Rioja, Murcia y País Vasco, con una caída de las notificaciones emitidas en el mismo período del año anterior del 83%, 71% y 61%, respectivamente. Por otro lado, las menos afectadas son Andalucía, con un 33% menos de notificaciones, y Madrid y Cataluña, con un 38% cada una.

Nos ha impactado de forma negativa la suspensión de vistas judiciales, no solo con respecto a la paralización de los procedimientos, sino también por el coste económico y de tiempo que supone enviar a los profesionales a los juzgados desconociendo si finalmente se celebrará o no la vista para la que estaban convocados.

Sonia Benito, Managing director en Atlante

Según los datos extraídos, la media de suspensiones por la huelga durante este período es del 35% del total de los señalamientos y vistas programados. Durante las primeras tres semanas, se suspendían el 39%, mientras que en la última, el porcentaje bajó al 24%. El día de mayor suspensión fue el 3 de febrero con un 64%, mientras que el 17 tan solo dejó de celebrarse un 14% de las vistas.

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Javier Asensio, Isidro Martín de Nicolás, Socios fundadores de Atlante, y Sonia Benito Élices, Managing director, han hablado en Expansión sobre la apuesta de la compañía por la innovación, y han presentado sus nuevos lanzamientos: Dividae, Oportunalia y Legal Insights.

Puedes leer el artículo completo a continuación.

La combinación de tecnología, procesos y profesionales altamente cualificados, han convertido a Atlante en la compañía líder en el ámbito de los servicios de gestión procesal y en uno de los principales referentes LegalTech en España.

Javier Asensio e Isidro Martín de Nicolás, Socios Directores de Atlante, fundaron la compañía en 2015 junto a Sonia Benito, actual Managing Director. Siete años después, la compañía cuenta con más de 200 empleados entre sus oficinas de Madrid y Barcelona y recibe más de 18.000 notificaciones judiciales al día, que procesa a través de su software de creación propia LYRA. Toda esa información se indexa en los expedientes de los clientes, a los que se les ofrece un servicio 360° en la gestión integral de la deuda.

La previsión para este año es iniciar más de 350.000 procedimientos judiciales, con una cartera de más de 75 clientes de diferentes sectores. Una cifra récord en el sector. Según Sonia Benito, “el futuro de la Justicia en España pasa por la digitalización, porque no podemos seguir en 2023 trabajando como hace décadas. Hemos hecho un gran esfuerzo para llegar donde estamos y queremos poner a disposición del sector todas nuestras herramientas y recursos de tratado y procesado del dato. Como en muchos otros ámbitos de la sociedad, el sector legal en España tampoco puede perder el tren de la digitalización”

Apuesta continua por la innovación

Tras una primera fase de desarrollo de LYRA, Atlante inicia 2023 con unas perspectivas de crecimiento sin precedentes hasta la fecha. Según Javier, “esto es sólo el principio, prueba de ello son los nuevos proyectos que hemos lanzado a finales de 2022, Dividae, Oportunalia y nuestra herramienta de análisis y toma de decisiones Legal Insights, que pronto estará disponible para nuestros clientes”.

Dividae es una plataforma 100% digital que nace para dar una solución práctica, económica y eficaz a la recuperación de facturas impagadas de pequeños autónomos y PYMES, que directamente no se reclamaban. Con una inversión mínima, los clientes pueden determinar previamente la viabilidad de su reclamación con tan sólo volcar las facturas y rellenar un primer formulario de contacto.

Oportunalia es una plataforma de comercialización de activos inmobiliarios provenientes de procedimientos judiciales y liquidaciones de concursos de acreedores. En su portal web se encuentran de forma fácil y segura una gran diversidad de productos con descuentos relevantes sobre su precio de tasación. Según Isidro Martín de Nicolás, “el tiempo de subastas cerradas y sin acceso para el gran público se ha terminado. Queremos democratizar el acceso a la subasta y puja de activos inmobiliarios al usuario particular. Queremos facilitar el acceso a una serie de oportunidades a las que hasta ahora tan sólo unos pocos podían llegar”.

Lanzamiento de Legal Insights

El año 2023 estará marcado por el lanzamiento de su herramienta Legal Insights, que es el resultado de aplicar técnicas de Big Data y Machine Learning, a los millones de datos que la compañía ha acumulado a lo largo de los años. “La información a la que Atlante tiene acceso va a permitir a nuestros clientes predecir de forma rápida los tiempos de espera en cada partido judicial del país y las probabilidades de éxito de cada recurso según el juzgado donde se presente, sólo por citar algunos ejemplos”, añade Asensio. Según Isidro Martín de Nicolás, “es información muy relevante que va a tener un valor único para nuestros clientes y mediante los cuales van a poder diseñar su estrategia judicial con mayor precisión. Poder predecir los tiempos de recuperación según partido judicial y geografía, va a tener un impacto directo en el valor de la compra de sus carteras”.

Según Javier Asensio, “el desarrollo de Legal Insights era unos de los principales focos que teníamos desde que fundamos Atlante. Hemos invertido una gran cantidad de recursos en procesar y clasificar el dato. Tras años de desarrollo, hemos conseguido diseñar una plataforma que ya se actualiza a diario y que será una guía esencial para todos nuestros clientes. Va a ser como un sistema GPS, un mapa de la Justicia que nadie tiene en el sector”.

Atlante seguirá creciendo en el 2023

“En 2022 tuvimos la oportunidad de crecer de forma orgánica gracias a un mayor volumen de negocio con clientes existentes y, a la entrada en nuevos sectores, pero también gracias a la integración de Proinvest, que vino a sumar nuevas capacidades, soluciones y equipos a nuestro proyecto”, señala Isidro Martín de Nicolás, que también añade que la compañía seguirá creciendo “dando continuidad a la línea marcada estos años por la dirección, pero también con la mirada puesta en las oportunidades que aparezcan; estamos abiertos a nuevas operaciones corporativas, siempre con el foco en seguir siendo el mejor socio posible para nuestros clientes”.

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Aprovechando nuestra presencia como Platinum Sponsor en el Congreso Nacional de Crédito, organizado por el CMS, el pasado mes de noviembre Sonia Benito, Managing director en Atlante, ofreció una interesante entrevista a Derecho Práctico, medio online de divulgación Legaltech.

En esta se abordaron diversos temas, desde la integración de Proinvest, empresa especializada en la recuperación de deuda a través de una gestión judicial y extrajudicial, hasta tecnología e innovación en el sector legal.

José María, director de Derecho Práctico: Sonia, recientemente fuiste ascendida a Managing director en Atlante, asumiendo una responsabilidad de alto nivel en la compañía…

Efectivamente. Venía liderando las operaciones desde prácticamente mi inicio en la compañía y ahora es un escalafón más en el cual el reto no va a ser únicamente la parte de operaciones sino coordinar el resto de departamentos y hacer que la empresa crezca. Puedo aportar una visión nueva, la visión de una persona que tiene experiencia en la organización.

JM: Os vimos en el pasado Congreso Nacional del Crédito, organizado por CMS. Un evento que está creciendo mucho, y quizás por eso fuisteis uno de los Platinum Sponsor. ¿Cuál fue vuestra experiencia?

Los CMS al final se plantean como un espacio de conocimiento y de ver a todos los actores implicados en el sector del recobro. Como bien dices, hubo un crecimiento no solo de asistencia de los que forman parte de este mundo, sino que también se han sumado compañías telco y de otras ramas. Piensa que en el sector del recobro somos más de 20.500 personas trabajando, según el informe de ANGECO, y mueve un volumen de negocio considerable. Al final, se trata de un sector que crea dinamismo en el ciclo del crédito.

JM: Una industria la del recobro que emplea mucha tecnología por el gran volumen de documentos y datos que debe manejar…

Efectivamente. Con el volumen de procedimientos en judicialización y los expedientes que se gestionan la tecnología, evidentemente, es un pilar fundamental. No dejar de ser un sector que lo que busca es la rentabilidad a la hora de prestar el servicio o a la hora de recobrar, y esa gestión debe hacerse de la forma más eficiente posible. Estamos en una cadena en la que no sólo está la recuperación de cero a noventa días, sino que cuando pasa ese plazo, y se han agotado todas las vías consensuales, tenemos que irnos a la judicial. Esa pata, la judicial, es un sector puntero en lo que respecta a la digitalización de todos los procesos porque al final son los bancos, las empresas, los fondos de inversión, los que miden mucho el precio que están invirtiendo en los servicers que les están gestionando ese tipo de procedimientos. Eficientar entra de lleno en nuestro ADN.

JM: Este pasado verano integrasteis a ProInvest, empresa especializada en recuperación de deuda a través de una gestión judicial y extrajudicial. Casi medio año después, ¿cómo valoras esta operación?

Muy positivamente, tanto a nivel cuantitativo, por las líneas de negocio que compartíamos en las que utilizábamos herramientas muy similares, y también desde un punto de vista cualitativo, porque hemos integrado a equipos muy preparados en la gestión de carteras y además porque vamos a abordar nuevas líneas de negocio que no desarrollábamos desde Atlante o lo hacíamos de una forma muy incipiente, como la parte de recuperación judicial con dirección letrada. Y eso es gracias al equipo humano de Proinvest.

JM: Lleváis tiempo invirtiendo en tecnología y posicionándoos en el ecosistema legaltech. El software LYRA podríamos decir que es vuestro buque insignia a nivel de innovación y legaltech. ¿Vuestros clientes valoran ese esfuerzo que hacéis, esos recursos que invertís? ¿Le veis un retorno?

Claramente sí. Hemos creado soluciones ad hoc para hacer más eficientes los procesos y poder prestar el servicio a nuestros clientes de una forma más rápida y ágil y con menos margen de error. Pero tenemos desarrollos para ser más eficientes a nivel interno que los clientes nos están reclamando para, por ejemplo, revisar y mover el dinero de sus cuentas de consignación en los procedimientos que gestionamos.

JM: Esto es un ejemplo claro de que los clientes ya reclaman a empresas y despachos eficiencia y agilidad a través de legaltech…

Efectivamente. Nosotros subrogamos en muchas carteras que a lo mejor vienen de clientes que han estado judicializando una deuda, y entonces con ejecuciones de 2 a 5 años hacemos barrido de consignaciones y encontramos muchas que están retenidas, normalmente porque el juzgado no tiene medios o personal. Y eso es muy bueno para la cuenta de beneficios de nuestros clientes. Otro de los ejemplos lo encontramos en el dato. Atlante lleva muchos años con un volumen muy alto, hablamos de unos 400.000 expedientes judicializados vivos. Y gracias a que hemos generado un dato limpio desde el inicio, diseñando unos procesos iguales, nos proporciona un dato muy homogéneo. Lógicamente, tenemos que pasar un filtro de mejora, pero todo ello nos permite poder vender a nuestros clientes cuál es la mejor estrategia judicial, podemos determinar qué juzgados son más ágiles y dónde tienen que demandar antes para que el retorno sea más rápido y los costes de judicialización puedan mitigarse desde un principio.

JM: Veo que a través de la tecnología que empleáis apostáis, entre otras cosas, por la justicia predictiva y estadística…

Efectivamente, aunque es más estadística que predictiva. Y siempre con los datos que nosotros tenemos. Nos parece muy interesante que el Ministerio de Justicia ponga el foco en esa justicia predictiva y estadística con la nueva normativa sobre eficiencia digital. Lo que queremos desde Atlante es poder decirles a nuestros clientes si tienen que comprar o no deuda y dónde tendrían que demandar para que el retorno económico sea más ágil y rápido.

JM: Nos llama la atención que en 2022 habéis organizado una serie de mesas redondas, online y presenciales, en la que habéis contado con mucho talento entre los ponentes, y como botón de muestra déjame que mencione a los magistrados Eloy Velasco y Manuel Ruiz de Lara…

Así es. El trabajo de nuestro departamento de marketing es excelente, y hemos sido capaces de acercar a nuestra compañía muchos y talentosos profesionales del ámbito público. Unos profesionales que, personalmente, me parecen que están un poco huérfanos a la hora de aparecer en plataformas para conversar con el sector privado. Organizar foros de debate en los cuales no hablamos sólo los operadores privados sino también lo hace la parte pública es algo primordial, porque para mejorar la Justicia deben trabajar conjuntamente ambas ramas. Para que la Justicia sea más eficiente debe tener en cuenta a operadores jurídicos como nosotros porque somos un engranaje del sistema sin el cual éste no podría avanzar.

#SomosLegaltech #SomosAtlante #SomosLYRA #Digitalización #Justicia

Desde nuestros inicios, en Atlante hemos buscado impactar positivamente en la sociedad. Nuestro crecimiento como compañía está estrechamente ligado a nuestros compromisos con las personas más vulnerables, así como en el cuidado de nuestro entorno. Estas iniciativas son una muestra de nuestros primeros pasos en materia de RSC, pero que en el 2023 esperamos multiplicar para llegar a muchas más personas, ofrecerles calidad de vida y hacer de nuestro entorno un lugar mejor.

Sonia Benito, Managing director en Atlante.

Continuando en el marco de la estrategia de Responsabilidad Social Corporativa, en Atlante hemos iniciado este 2023 renovando nuestra apuesta por la sostenibilidad, la transformación digital, la inclusión social y la colaboración con distintas asociaciones solidarias.

A lo largo de 2022 realizamos varias acciones de índole solidario, y también materializamos nuestro compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.

A nivel externo, participamos en distintos proyectos. El primero fue al inicio del año, donde apoyamos a la población ucraniana afectada por la guerra, no solo donando medicamentos, ropa y alimentos, sino también trasladando a un total de 60 refugiados.

Continuamos aportando nuestro grano de arena participando en el proyecto Gafas de Realidad Mejorada, promovida por Fundación Aladina, financiando la compra de un total de 850 gafas creadas por niños y adolescentes para colaborar en la creación de la nueva Unidad de Oncología Pediátrica en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona.

Siguiendo en esta línea, participamos también en la subasta Grandes Deseos, de la mano de la Fundación Pequeño Deseo, donde se nos adjudicaron dos lotes cuyo importe de la puja fue destinado a crear experiencias que cumplan los mayores deseos de los niños que padecen una enfermedad grave o crónica.

A nivel interno, abogamos por una constante cultura medioambiental y de optimización de recursos, específicamente en el uso de papel. Así, durante el 2022 nos dedicamos a la divulgación de la importancia de la sostenibilidad en el sector jurídico a través del impulso de la digitalización.

Para seguir fomentando nuestros valores, como son la diversidad y la inclusión social entre colectivos, colaboramos estrechamente con la Fundación Down, fomentando la empleabilidad de personas con síndrome de Down.

Este 2023, seguimos trabajando comprometidos con la sociedad.

#SomosLegaltech #SomosAtlante #SomosLYRA

Graduado en Derecho por la Universitat Autònoma de Barcelona y con más de 7 años de experiencia ejercida en abogacía, Albert Serrano Marcos, abogado especialista en Litigación en Atlante, comparte su opinión sobre la Inteligencia Artificial en el sector legal, en concreto el ChatGPT, bajo el título: ChatGPT: ¿una realidad en el sector jurídico?

¿Creen acaso que no puedo leer más hondo que la piel superficial de vuestro cerebro? En el fondo no quieren. (…) No pueden quedar en ridículo ante mí sin sentirse ofendidos.

Yo, robot, Isaac Asimov, 1950.

La obra literaria de Isaac Asimov, especialmente su saga de robots, ha sido una gran fuente de inspiración en el desarrollo de la inteligencia artificial. Sus novelas han abordado temas como la relación entre robots y humanos, la ética en la programación de robots y la posibilidad de que la inteligencia artificial supere a la humana.

ChatGPT, es un modelo de procesamiento de lenguaje desarrollado por OpenAI en 2018, basado en el modelo de lenguaje por Inteligencia Artificial GPT-3 que ha sido entrenado con un gran volumen de texto en diversos idiomas, lo que le permite generar textos coherentes y naturales. Al igual que en las novelas de Asimov, en el desarrollo de GPT-3 se tuvo en cuenta la ética en la programación, ya que se trata de un modelo de procesamiento de lenguaje que puede ser utilizado en una amplia variedad de ámbitos, incluyendo el sector jurídico y debe estar diseñado para garantizar la justicia y la transparencia en su uso.

La inteligencia artificial es un campo en constante evolución, con orígenes remontándose a la década de 1950. Sin embargo, ha sido en las últimas décadas cuando ha experimentado un auge en su desarrollo y aplicación en diversos ámbitos, incluyendo el sector laboral. En este ámbito, las tecnologías de inteligencia artificial han demostrado su capacidad para automatizar tareas repetitivas y mejorar la eficiencia en el proceso de toma de decisiones.

En el sector jurídico, el uso de tecnologías de inteligencia artificial como este modelo de procesamiento de lenguaje, ha demostrado ser una herramienta valiosa en la automatización de tareas como buscar términos específicos en grandes cantidades de texto o identificar patrones en los documentos. Esto puede ayudar a ahorrar tiempo y esfuerzo en la revisión manual de documentos, lo que se traduce en una mayor eficiencia y una reducción de costos.

Algunas de las ventajas de su utilización en este ámbito del Derecho incluyen:

• Generación automatizada de documentos legales: La capacidad de generar contratos, acuerdos y otros documentos legales de manera automatizada permite ahorrar tiempo y recursos a las empresas.
• Análisis de documentos legales: La capacidad para analizar documentos legales y extraer información relevante puede ayudarnos a los profesionales del sector a tomar decisiones más informadas.
• Generación automatizada de resúmenes de casos legales: La capacidad para generar resúmenes de casos legales de manera automatizada puede ayudar a comprender mejor los detalles de un caso.
• Búsqueda de precedentes legales: La capacidad para investigar casos y encontrar precedentes legales relevantes nos ayudan a preparar casos de manera más eficiente.
• Predicción de resultados de juicios: La capacidad para predecir los resultados de juicios utilizando datos históricos y algoritmos de aprendizaje automático ayuda a los operadores jurídicos a preparar mejor nuestras estrategias.
• Traducción de documentos: la capacidad para comprender y generar varios idiomas permite traducir documentos legales de forma precisa y rápida, lo que es especialmente útil para casos internacionales.

Algunas de las entidades del sector que utilizan ChatGPT son LawGeex, una plataforma que utiliza inteligencia artificial para analizar contratos y prevenir riesgos legales, y Ross Intelligence, una plataforma de inteligencia artificial que ayuda a los abogados a investigar casos y encontrar precedentes legales relevantes.

Una de las principales preocupaciones a este respecto es la falta de transparencia en la toma de decisiones de los algoritmos, lo que puede llevar a resultados injustos. También existe el riesgo de reemplazar el juicio humano con la automatización, lo que puede tener consecuencias negativas en la justicia. Siguiendo con las referencias a la literatura de ciencia ficción, otro posible riesgo inherente a estas tecnologías de procesamiento del lenguaje es convertirse en una suerte de dispositivo como el «hablaescribe» de la novela «1984» de George Orwell utilizado por el gobierno totalitario del libro para controlar la información y la comunicación de la sociedad, registrando así todas las conversaciones y escritos de las personas.

Estas son solo algunas de las aplicaciones de ChatGPT en el sector jurídico, pero es importante mencionar que esta tecnología está en constante evolución y se espera que en el futuro se desarrollen nuevas aplicaciones. Sam Altman, CEO de OpenAI, anticipó que en el futuro vendrán tecnologías de inteligencia artificial que harán parecer a su modelo como un «juguete aburrido».

El futuro del lenguaje humano ejecutado por máquinas, sin duda, ya está aquí. Con unas pocas indicaciones (o «prompts» como se les suele llamar en la jerga anglosajona), son capaces de generar un texto con un alto nivel de coherencia y precisión.  No obstante, este no está exento de imprecisiones y errores por lo que siempre será necesario la revisión y verificación de la información por parte de un especialista.

En este sentido, huelga mencionar que, la información con la que el modelo ha sido entrenado está actualizada hasta 2021 y no está conectado a internet.  Su utilización está abierta al público mediante beta abierta desde noviembre del año pasado por lo que animo al lector a retar a la IA a pasar el test de Turing. Comprobaran como la prueba se ha quedado obsoleta.

La inteligencia artificial se ha convertido en una herramienta cada vez más importante en la sociedad actual, y el sector jurídico no es una excepción. El campo del procesamiento del lenguaje está revolucionando el ámbito legal y de servicios jurídicos. Esto ha quedado evidente con las impresionantes habilidades mostradas con la presente aplicación que ponen de manifiesto que los juristas no somos tan especiales como nos creíamos. La automatización está llamando a la puerta y, pese a que esta transformación no será abrupta, muchas tareas de nuestro sector serán realizadas por la Inteligencia Artificial, por lo que será necesario por nuestra parte desarrollar otras habilidades para permanecer competitivos. El problema es que un desarrollo completo de la Inteligencia Artificial se re-diseñaría a un ritmo cada vez mayor. Los humanos, que estamos limitados por la lenta evolución biológica, lo tendríamos cada vez más difícil para competir y el miedo del reemplazo se tornaría real. Algunos dirán que exagero, pero ¿qué me dirían si les digo que este artículo no ha sido escrito por mí?

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El pasado viernes 13, Daniel Jaume, Head of Sales and Business Development en Atlante, realizó una entrevista para Radio Intereconomía, medio nacional especializado en información económica. En esta, se abordó el tema de la innovación y digitalización en la actualidad, poniendo el foco en el sector de la recuperación de la deuda.

¿Cómo definirías Atlante?

Atlante es una compañía que presta servicios de gestión procesal durante el proceso de recuperación del ciclo de gestión del crédito, dando apoyo a grandes compañías, bancos, entidades financieras y fondos de inversión en carteras de crédito.

El sector, vuestro estilo de negocio, está creciendo en España. ¿En qué medida?

Nosotros prestamos servicio a un mercado muy especializado. Nuestros clientes potenciales son, como he comentado, bancos, entidades financieras… Todas estas compañías están muy acostumbradas a acudir a servicers especializados como nosotros.

Lo que estamos haciendo ahora a través de proyectos como en el que nos hemos embarcado con Dividae es, a través de la aplicación de nuevas tecnologías y canales, ampliar estos servicios a compañías que no están tan acostumbradas a recurrir a servicios legales o que sencillamente no han contemplado esta posibilidad porque les resulta complicado.

En Dividae, plataforma online, se ofrece la tecnología como una herramienta, por ejemplo, para recuperar la deuda pequeños empresarios y autónomos. Para ello, es importante la accesibilidad, ¿verdad?

Totalmente. Esto va en relación con la pregunta anterior de cómo crece el mercado; efectivamente, en España tenemos un parque empresarial de PYMES muy amplio, que necesita este tipo de servicios.

Sabemos que en 2022 se cerraron de forma definitiva más de 30.000 empresas, dato al nivel de los años de la crisis financiera, y se prevé que, con el fin de la moratoria concursal, haya un incremento de los concursos de acreedores del 76% respecto al 2019. Los costes fijos suben, la facturación baja, no todas las empresas pueden trasladar la inflación a sus precios… Por eso, es el momento de que todas las empresas inviertan en soluciones que mejoren su liquidez, que puedan reducir sus impagos y que les permita tener disponible el dinero que se les debe lo antes posible.

Esto lo estamos haciendo a través de Dividae. Nosotros, a través de nuestra plataforma, hacemos accesible la reclamación integral. Trasladamos el know-how de nuestra compañía, que combina el conocimiento de nuestros equipos de negociadores y de abogados especialistas en recobro con procesos automatizados.

¿Cómo lo hacemos más accesible? Ofreciendo a la PYME una experiencia de usuario que es netamente digital, a través de un servicio web en el que el mismo empresario o el gestor que le presta el servicio entra a Dividae, crea su cuenta, sube sus facturas impagadas y su cuenta de Dividae le va informando en todo momento y en tiempo real del estado de su reclamación. Luego, a través de la plataforma, vamos notificando si hay progresos en la reclamación, analizamos automáticamente la documentación que se nos aporta e informamos acerca de si se puede continuar por la vía judicial, de ser esta necesaria. Si esto es así, le asesoramos de forma transparente: explicamos de forma clara, sin lenguaje técnico, haciendo así accesible a cualquiera el proceso jurídico, cómo vamos a continuar con la reclamación.

El nicho al que queréis entrar son PYMES, incluso autónomos, gente con poco músculo financiero. El modelo de negocio cuál es, ¿suscripción? ¿Cómo se paga?

Dividae tiene que pensar en la pequeña y mediana empresa que tiene facturas impagadas o, por ejemplo, también en aquellas gestorías que le da servicios financieros a empresas y administrativos y que tienen facturas impagadas. Cualquiera de estos perfiles se puede registrar y crear una cuenta.

¿Cómo es la estructura tarifaria? Muy sencilla: entras, subes una factura que tienes impagada y, lo primero que vamos a intentar en Dividae es el pago de esa factura a través de una reclamación extrajudicial. Solo vas a pagar un fijo muy bajo por el inicio de la reclamación extrajudicial.

A partir de ahí, y en función del éxito que se vaya logrando, te vamos asesorando y aconsejando para continuar con el procedimiento. Es muy claro, sencillo y además tiene unos precios más económicos por hito que si recurres, por ejemplo, a una solución tradicional como un despacho de abogados o una agencia de recuperación de toda la vida.

Solo pagas por hito: inicias la reclamación extrajudicial y si esta no llega a buen puerto, nosotros te asesoramos, revisamos la documentación y te decimos “oye, esto es susceptible de ir a una reclamación judicial”

De tu factura de 5.000€ impagada, por ejemplo, pagas tus 19.90€ por la reclamación extrajudicial y si no se recupera ahí, nuestro abogado te asesora y te decimos “oye, esto es susceptible de ir a la vía contenciosa, interponemos un monitorio, pagas otro pequeño fee y continuamos con la reclamación hasta el final, hasta que lo recuperas”

Estamos teniendo eficacias muy altas en la recuperación de deuda corporativa, de empresas.

Hay otros aspectos, como el Machine Learning que aplicáis en LYRA, por ejemplo, lo que demuestra que la IA, la tecnología y la innovación, forman parte también del Legaltech.

En Atlante hemos crecido con ese approach netamente tecnológico. Un despacho que envía emails no es una Legaltech. Nosotros hemos aplicado desde el inicio a todos nuestros procesos esas tecnológicas que comentas: creamos un software propio de gestión que, primero, nos permite conectar con las plataformas digitales de Justicia como Lexnet para la presentación masiva de procedimientos judiciales, pero luego, lo que hace LYRA, nuestro software de creación propia es que, una vez iniciado el procedimiento, descarga las notificaciones que provienen del juzgado, las leemos de forma automática, las interpretamos, extraemos la información y lo cargamos en los sistemas de nuestros clientes, de modo que el abogado de mi cliente sabe en 24 horas que ya ha habido una notificación relacionada con sus procedimiento y que tiene un plazo de 3 días para presentar cierta documentación.

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